En una jornada larga, húmeda y vibrante, el neerlandés se impone sobre Pogacar y Vingegaard con un sprint impecable. La etapa 2 deja al rojo vivo la clasificación general.
ÁNGEL MIGUEL PÉREZ MARTÍNEZ.
La lluvia no detuvo la batalla. Ni el viento. Ni las subidas. La segunda etapa del Tour de France 2025, disputada este domingo entre Lauwin-Planque y Boulogne-sur-Mer (209 kilómetros), fue un espectáculo de estrategia, resistencia y nervio. Y en el remate, Mathieu van der Poel sacó lo mejor de sí para vencer en el sprint final a Tadej Pogacar y Jonas Vingegaard. El neerlandés no solo ganó la jornada, también se enfundó el maillot jaune.
Fueron más de cinco horas de tensión sobre el pavimento mojado del norte francés. La etapa comenzó con retraso por temas logísticos, pero no tardó en calentarse: el pelotón rodó rápido y compacto hasta que comenzaron los ascensos de tercera y cuarta categoría en los últimos 50 kilómetros.
Yevgeniy Fedorov ganó el sprint intermedio, pero lo mejor estaba por venir. En el descenso hacia Boulogne, Van der Poel impuso su potencia y remató con maestría. Pogacar respondió tarde. Vingegaard aguantó. Pero ninguno pudo con el neerlandés del Alpecin-Deceuninck, que ahora lidera la general con una ventaja de cuatro segundos sobre Pogacar.
La jornada también dejó incidentes: Geraint Thomas y Adam Yates sufrieron caídas sin consecuencias graves. El equipo Cofidis, en cambio, vivió su propio drama: denunció el robo de once bicicletas de su camión antes del inicio de la etapa.
El nuevo líder del Tour se mostró cauto en meta. “Sabía que tenía una oportunidad. El equipo trabajó bien. Pero esto apenas comienza”, dijo Van der Poel, ahora vestido de amarillo.
📊 Clasificación general tras etapa 2:
| Puesto | Corredor | Tiempo |
|---|---|---|
| 1️⃣ | Mathieu van der Poel | 8h 38’ 42″ |
| 2️⃣ | Tadej Pogacar | + 4 s |
| 3️⃣ | Jonas Vingegaard | + 6 s |
La tercera etapa, entre Valenciennes y Dunkerque, promete más batalla entre favoritos. Las piernas están frescas, pero los márgenes ya son estrechos. El Tour apenas comienza, y ya está ardiendo.


