El contundente material probatorio presentado por una fiscal delegada ante el Tribunal fue suficiente para judicializar a seis personas por los delitos de concierto para delinquir, agravado, concusión, prevaricato por omisión, acceso abusivo a sistema informático; revelación de secreto, peculado por uso y abuso de autoridad por omisión de denuncia, cada una según sus responsabilidades.